Libertad (para Alfon)

“Queremos difundir una idea clara: nuestros hijos no son delincuentes. Están educados en unos valores, son integrantes de la clase trabajadora, tienen unos principios y una ideologia. Hay una persecución y una intención de criminalizar a los jovenes que luchan por sus derechos...”
Elena Ortega, madre de Alfon.

Las operaciones Pandora, Piñata, Araña y demás, la criminalización generalizada de la protesta y la disidencia no son los últimos zarpazos de un oso que agoniza, ni casos aislados.

Siempre es momento de recordar que

“ninguna opinión es ley, ninguna opinión es delito. Que el gobierno trate de controlar el pensamiento, de prescribir determinadas opiniones o de proscribir otras es el colmo del despotismo” (Alexander Berkman, 1917).